CEBO, la propuesta gastronómica del hotel Urban

Una propuesta basada en el producto, cocina mediterránea con toque madrileño y en los que su nuevo chef, Aurelio Morales, asume este nuevo proyecto gastronómico que muy pronto será referencia en la capital. Como Jefe de Sala Paco Patón, que tiene el reconocimiento de Premio Nacional de Gastronomía al Mejor Director de Sala.

El espacio será utilizado solamente por 25 comensales por servicio, que podrán degustar cualquiera de los dos menús que están diseñados, el menú corto con 15 pasos y el menú largo con 20. La despensa se surte de los sabores de Cataluña y con productos de Madrid, con lo que se obtiene una cocina contemporánea, progresiva y libre que apuesta por el producto de origen que va renovándose en carta según temporada.

Los pescados y verduras de temporada son los platos más destacados de una carta que también cuenta con referencias de carne, y en la que únicamente se identifica el nombre del ingrediente principal sin mención a su presentación o cocinado. Los calçots, los callos, las espardenyas, la gamba roja de Palamós, el Jarrete de Madrid, el chipirón de la Costa Brava, o los postres Petit Fours del convento o Boqueria, son algunos de los protagonistas del menú. ¿Imaginación? Al final se convierte en una cocina muy participativa de todos los comensales.

Aurelio Morales se dedicó desde muy joven al mundo de los fogones, pasándose por las cocinas de El Bulli, Tickets, Àbac o Echaurren en formación y ha ejercido como jefe de cocina del restaurante Miramar, dos Estrellas Michelin, en Llançà (Girona) y como jefe de creatividad, del grupo liderado por el chef, Paco Pérez, durante 8 años. Paco Patón es el Director de Alimentación y bebidas del Hotel Villa Real & Hotel Urban y asume en CEBO la dirección del servicio como jefe de sala.

CEBO cuenta con dos entradas – desde el lobby y directa desde el exterior –, que dan acceso a una primera sala en la que los comensales son recibidos con un cóctel y una selección de snacks mientras eligen qué opción de menú degustarán. El Salón Principal, presidido por una majestuosa lámpara de cristales de cuarzo, suelos de granito negro Zimbabue, paredes de hormigón con panelados de ébano dorado y gresite de pan de oro de Bisazza, cuenta con una barra central en la que el equipo de cocina elabora en vivo los entrantes y postres, a la vista de los comensales.

Un reservado para 6-8 personas, separado del salón por una gran vitrina con más de 140 botellas de champagne, cava y vino, permite a los comensales ver al chef elaborando los diferentes platos que van a degustar a través de una ventana a su “cocina-laboratorio”. El Hotel Urban completará la estrategia renovando su actual oferta gastronómica en todas las áreas.

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