CONGRESO INTERNACIONAL DEL ARROZ – PARTE 1/2 (VALENCIA)

CONGRESO INTERNACIONAL DEL ARROZ – PARTE 1/2 (VALENCIA)

Escrito por: Ximo    6 octubre 2011     2 minutos

Primera parte de nuestras impresiones del Congreso Internacional de la Paella, celebrado en Valencia del 29 de septiembre al 2 de octubre. Dicho evento gozó de la asistencia de más de 50 reputados chefs y de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá.

Del 29 de septiembre al 2 de octubre de 2011 se ha celebrado el Congreso Mundial del Arroz en Valencia, donde la primera idea es que solamente habrá paellas o arroces al estilo del Levante, pero si es del arroz, el mismo interviene en muchos platos, en la famosa morcilla de Burgos (de arroz) y el no menos sushi y todos los platos de cocina oriental que tan de moda se han puesto.

El espacio se ha dividido en dos partes. La primera, al aire libre, denominada el túnel del arroz, en la Ciudad de las Artes y las Ciencias, bordeando el lago, en el Paseo Sur de la Ciudad de las Ciencias. Cada representante o establecimiento disponía de una jaima donde preparaba y distribuía los arroces preparados, previa entrega del tique que había que adquirir previamente al precio de 4 euros.

La otra parte eran stands de diversos distribuidores u organizaciones, como la Costa Blanca de Alicante, comercializadoras de azafrán y otros productos que intervienen en la paella, tartas, dulces, chocolates, kakis, es decir, productos alimenticios que complementan los arroces.


Han sido más de 50.000 personas las que han acudido a este Congreso, superando todas las expectativas pues se han servido más de 60.000 raciones de arroz.

El certamen ha congregado a más de 50 de los mejores chefs del mundo, quienes han puesto a través de sus ponencias las diferentes formas de cocinar el arroz, típicas de sus regiones o paises de origen.

Nosotros hemos echado en falta un poco de sombra, que se podría haber creado uniendo las jaimas con algún material que ventilara y eliminara el sol directo, pues hacía calor. Si hubiera llovido, como anunciaban todos los mapas del tiempo, habría sido imposible circular por el mismo. Igualmente los sitios para sentarse eran escasos (a pleno sol), por lo que hemos visto a muchas personas comerla de pie. No es muy cómodo.

Para una afluencia de público tan elevada, los baños se han quedado pequeños, además de estar situados en un lugar de difícil acceso (un vigilante jurado no dejaba pasar por una puerta, había que dar la vuelta).