Piu di Prima – La otra cocina italiana (Madrid)
Muchas veces cuando nos dicen de ir a comer a un italiano enseguida se nos viene a la cabeza de qué vamos a pedirnos la pizza o con quien la vamos a compartir. Pero hay otra cocina italiana, donde en su carta no aparece ninguna pizza, las pastas, en su mayoría, son caseras y la calidad de los productos así como su elaboración son, en muchos casos, de alta cocina. Más adelante ampliaremos estos pequeños avances.
Un local amplio con tres espacios, quizás cuatro, pues la barra es espaciosa y dispone de una zona muy acogedora con sofás, donde en principio se puede esperar a nuestros compañeros de mesa, si así lo deseamos. Al fondo dos amplios salones, comunicados, con mucha luz pues disponen de unos amplios ventanales que dan a un patio interior. Y en la planta inferior, otro espacio que puede ser utilizado como reservado para eventos o ampliación del restaurante, pues tiene una capacidad en torno a los 40 comensales. Pasamos a nuestra experiencia.
A nuestra llegada y después de asignar la mesa, nos sirven la bebida y un aperitivo muy italiano: Mortadela partida muy fina a cuchillo y queso, acompañado de unos grisines crujientes. Y nos llega el primer plato o entrante, dos alcachofas confitadas en aceite y a la plancha, una por comensal y que se pide por unidades. Evidentemente solo en temporada, porque es un manjar, el corazón de la alcachofa que nos transporta a sabores y por que no decirlo, admiración, hacia la elaboración de este plato. Sabor y textura excepcionales. Un magnífico comienzo.
Confieso sinceramente que no soy muy partidario de los quesos frescos, pero a partir de probar este plato quizás tenga que cambiar de opinión. Se trata de Burrata con tomate y rúcula, pues además de tratarse de un producto de excelente calidad se prepara ligeramente aderezada de una forma magistral. Sorprendente y deliciosa.
Hay algunas pastas que elaboran ellos mismos de una forma artesana, entre ellas hemos escogido la que más nos ha llamado la atención por el nombre y que posteriormente, en el momento de la comanda, nos han confirmado: El plato denominado Ravioli Piu di Prima, relleno de albahaca y yema de huevo de corral y cubierto con láminas de queso parmesano. Sin palabras, una elaboración trabajada y original.
Ibamos a decir que llegamos al plato más completo, pero todos los anteriores ya lo han sido prácticamente. Pero quizás al ser el que pone final a la parte «salada» sea de los que mejor recordamos posteriormente. ¿Y de qué se trata? Pues de un maravilloso risotto con tomate cherry, pimentón en dos cocciones y picantón. En la carta indican que la Guia Gallo en su 8ª edición lo ha incluído como uno de los mejores del mundo. Damos fe de la calidad, textura, sabor, presentación, … del mismo.
Llegamos a los postres, si bien tomamos nota de platos de los que no hemos podido disfrutar porque ya estábamos completamente satisfechos, pero que quedan pendientes para una próxima visita. Por supuesto que los postres sí llegan, como no podía ser menos el tiramisú, coronado con unas perlas de amaretto. Imposible describir la sensación al degustar el mismo, sabores maravillosos, textura ideal, … ¡¡¡Buenísimo!!!.
No menos interesante es el volcan de queso con frutas del bosque que el otro comensal disfruta con placer, pues la conjunción de productos es inmejorable. Finalizamos con un café que como no podía ser menos, está preparado de una manera tan correcta como nos tienen acostumbrados nuestros casi vecinos italianos. De hecho en todos los bares y restaurantes españoles solicitando un «italiano» saben que es corto y sin leche. Una relación calidad/precio excelente. Merece la pena, es una apuesta segura de disfrutar de una buena mesa.
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