Jardín de Alma para recibir el verano (Madrid)
Porque son muchas las razones para que este oasis, tan de moda, sea el lugar idóneo para soportar los primeros calores del verano. Un amplio y cómodo jardín, zona de chill out, restaurante de mantel, mesas altas para picoteo y sobre todo un ambiente y atención de primera linea.
Para picotear tienes una amplia carta denominada «Bocados con Alma», nos atrevemos decir que es gastronomía de calidad en pequeños bocados. Si por el día es acogedor por la noche se convierte en un super jardín tranquilo y relajado donde poder disfrutar de unos «Bocados del Alma».
Con la llegada del verano apetece relajarse y desconectar al aire libre. Lo hemos podido hacer todo el año en El Jardín del Alma, que tiene más capacidad exterior que interior, pero ahora la experiencia se disfruta más que nunca. Estrenan una zona de mesas altas, más informal y para la que no es necesario tener reserva, ¡y no viene sola! Trae carta ‘propia’ debajo del brazo… aunque no exclusiva, ya que las nuevas propuestas de picoteo, los ‘Bocados con Alma’, se pueden pedir también en los sofás del chill out tanto a mediodía como para cenar.
¿Y qué no puede faltar hablando de tapeo? Pues una ración de Ensaladilla rusa con Alma -si lleva ‘apellido’, ¡hay que probarla!-, una Degustación de Gildas para los de buen paladar, o por supuesto, su Cecina de León, aquí aderezada con nuestro Aceite Virgen Extra Alma Cosecha Temprana y almendras fritas, una Tabla de quesos nacionales con regañás de Don Pelayo, unas Ostras naturales -con o sin champagne Veuve Clicquot-. Y sí, en esta zona también se puede acabar con dulce… ¿un Corazón de chocolate con helado de jengibre?
Pero las sorpresas no acaban aquí, porque en su carta principal, la de sala y el resto de mesas del jardín, donde se come con mantel, también hay novedades. Con la estación llegan platos como la Ensalada de burrata, tomate azul, cristal de albahaca y perlas de pesto; un espectacular Pulpo nacional a la brasa con vinagreta de temporada, un Tataki de atún rojo con mahonesa de avellana tostada y caviar de AOVE; o un plato con ‘alma marinera’ como el Lomo de lubina sobre crema de cebolla dulce y crujiente de puerro. Muchas opciones frescas que encandilarán a su ya fiel clientela.
Y si a algo invita el buen tiempo es a estirar las tardes hasta juntarlas con la noche en un remanso de paz como es este magnífico y amplio jardín de Arturo Soria. A disfrutarlas con sus cócteles de autor personalizados por Gades Fusión, como el Alma Martini -vodka infusionado con cítricos, fruta de la pasión, notas a vainilla y acabado con burbujeo de espumoso- o el Samsara, que nos traslada a lo más profundo de la cultura hindú con una mezcla de especias, té negro, mango y un toque lácteo con base de gin Whitley Neill. Sin duda platos y tragos que harán de cada visita con familia o amigos, una experiencia inolvidable.
El Jardín de Alma es un rincón acogedor y tranquilo que apuesta por la gastronomía de calidad con producto nacional incorporado a recetas del mundo y muchas de nuestra cultura y tradición. Gran parte de las mesas están al aire libre, entre el jardín, la zona chill out y un alero del restaurante que hace de terraza semicubierta, con lo que es perfecto para ‘respirar’ mientras se come, se pica, se toman unas ostras o un cóctel a cualquier hora del día.
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