El multiespacio gastronómico Essentia reabre sus puertas (Tarancón-Cu)

Y además lo celebra celebrando su cuarto aniversario. Después del largo cierre obligado de la hostelería, sus salones de bodas, su gastrobar, su restaurante y un próximo hotel de 70 habitaciones. situado a solo 45 minutos de la capital, el mutiespacio –integra restaurante, gastrobar, salones para eventos y carpa de bodas– se posiciona como un lugar de culto y de destino para el público foodie de todo el país, gracias a una materia prima de primera clase en la que sobresalen el cordero lechal castellano, los pescados y mariscos a la brasa, la chuleta de vaca vieja finlandesa y el cerdo ibérico.

Tras el parón provocado por el estado de alarma, Essentia vuelve a abrir sus puertas con todas las garantías de seguridad e higiene para su clientela y empleados. La disposición de códigos QR para consultar la oferta a través del móvil y de cartas desechables para quienes tengan dificultades tecnológicas; la exhaustiva desinfección de las mesas después de cada servicio y, por supuesto, la distancia entre comensales.

Durante la cuarentena, Essentia ha trabajado en la puesta al día de sus instalaciones y en la ampliación de su zona de gastrobar, en la que, si bien la barra se ha inutilizado por normativa, se han ganado 43 m2. La construcción de un nuevo edificio, que albergará el hotel y un salón de actos de 250 pax y que contará con las últimas innovaciones tecnológicas en materia hotelera –entre ellas el uso del móvil para abrir las puertas evitando las tarjetas de plástico– es la que ha permitido esta ampliación, que está motivada por el éxito de este espacio. En él se sirven cerveza de grifo –mediante un sistema llamado duotank que mantiene la temperatura y la presión de la bebida sin añadir CO2 extra, haciéndola más suave y ligera–, cervezas artesanas, vinos por copas y una carta variada para tapear o comer en plan informal, en la línea de materia prima selecta que caracteriza a Essentia.

En ella no faltan sus célebres torreznos de panceta ibérica, seña de identidad de la casa, que se maduran en una cámara propia, son sabrosísimos y se presentan tiernos por dentro y crujientes por fuera, ni otras chacinas como lomo de orza estilo Essentia, morteruelo casero de Cuenca o zarajos de cordero lechal de Tarancón. Tampoco, raciones clásicas como unas melosas croquetas de jamón ibérico de bellota rebozadas en panko o la ensaladilla rusa; algunos entrantes marinos (tartar de atún Balfegó, calamares nacionales a la andaluza…); una buena variedad de hamburguesas (de ternera, de presa ibérica, de pollo de corral y de vaca vieja finlandesa) y de molletes (destaca el piripi Essentia, con lomo ibérico, panceta ibérica de bellota, queso fundido, tomate y alioli) y algunas de las especialidades más demandas del restaurante como la careta de cochinillo confitada a baja temperatura, las chuletillas de lechal a la brasa, el entrecot de vaca trinchado o la pluma y el lagarto a la parrilla.

Por su parte, el restaurante de Essentia, erigido como un auténtico centro de peregrinaje para el gourmet, reabre también con su oferta habitual, en la que la carne, madurada y conservada en sus propias cámaras que controlan la humedad y la temperatura para una óptima conservación de las piezas, es la gran protagonista. Destacan el soberbio chuletón de vaca vieja finlandesa –raza con la que consiguen la filtración, la textura y el sabor deseados, tras maduraciones de entre 60 y 90 días–, el cordero lechal en chuletillas y en paletilla asada y el cerdo ibérico, en torno al cual ofrecen un menú monográfico de 55 € que incluye ocho platos elaborados con las piezas con más grasa infiltrada del animal, desde los más conocidos, como el solomillo, la pluma o la presa hasta los menos, como el abanico o el lagarto.

Para los no tan carnívoros hay estupendas opciones: arroces, judiones de La Granja, verdinas y una sólida propuesta de pescados y mariscos que se elaboran a baja temperatura en horno de vapor o roner y a la parrilla de carbón respetando el sabor de especies tan nobles como el rodaballo, la merluza de Burela, el bogavante azul gallego, la gamba roja de Denia y blanca de Huelva o la cigarra real.

Desde el pasado 14 de marzo, fecha en la que por el decreto del estado de alarma los establecimientos hosteleros tuvieron que echar el cierre, Essentia ha estado sirviendo a domicilio su plato estrella por excelencia: la chuleta de vaca finlandesa de raza Ayrshire, considerada como la mejor carne de vacuno del mundo en la edición 2018 del concurso internacional World Steak Challenge. De ahora en adelante y ante la excelente acogida de este servicio –que funciona en toda la península y puede contratarse a través del teléfono 969 322 397– seguirá ofreciendo en delivery este producto, que puede prepararse en casa sin brasas siguiendo los trucos que ofrecen en sus redes sociales.

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