La Terraza del Cielo de Urrechu (Pozuelo de Alarcón – M)

Ficha

Terraza El Cielo de Urrechu

C.C. Zielo local 217 Avda. Europa 26B - Pozuelo de Alarcón Madrid

Teléfono: 91.709.32.85

Tipo de cocina: Vasca con toques mediterraneos

Plato recomendado: changurro, pescados del día

Recomendación: Reservar

Precio medio: 50€

cielodeurrechu.com/es/

4,6 (sobre 5,0)

Hace años tuvimos la satisfacción de disfrutar de la referida terraza que ya en su día nos pareció magnífica. Iñigo Urrechu nos transmitió su satisfacción del espacio recién inaugurado al que denominó como «una caja de bombones vacía», que él se había encargado de rellenar. Hemos vuelto y la transformación ha sido espectacular, para no perdérselo.

Actualmente se distribuye en dos espacios: Una parte con una barra, mesas bajas y altas, estas últimas en el ventanal que permite ver desde la Casa de Campo hasta … las cuatro torres de la Plaza de Castilla y algo más. El otro espacio, mucho más amplio, es el restaurante, con mesas bajas, de muy alto nivel y con las mismas vistas, separados del anterior por cristaleras. El ambiente en ambos espacios es agradable, cómodo y muy confortable. Un problema para las personas con movilidad reducida son la treintena de escalones para llegar a la misma, pues además carece de baño en esta planta. En la planta inferior, a nivel de calle, también existe restaurante con las mismas vistas.

Como siempre reserva de mesa previa. Cuatro comensales, día laborable a mediodía, sin ser víspera de festivo. Llegamos a las 14,30 y había ya alguna mesa ocupada pero a las 15 horas llegaba al 70%, según la situación actual nos parece una cifra muy correcta. Quizás uno de los factores sea la atención, exquisita. Muy profesionales y correctos.

Además de la carta nos «cantan» los platos fuera de carta, sin indicar los precios (para nosotros es más correcto indicar el precio al mismo tiempo, igual que en la carta figura Plato-Precio). Pedimos el precio de alguno de ellos que nos fué indicado sin mayor problema. Uno de los comensales era alérgico a las aceitunas por lo que tuvimos que hacer algunas preguntas.

Para compartir, una excelente cazuela melosa de callos con morros y morcilla asturiana (hace poco tiempo los callos de Zalacaín – del Grupo Urrechu – quedaron campeones de un concurso de callos). Aunque Iñigo Urrechu formaba parte del Jurado, no votó en la elección. En este caso una ración suficiente para disfrutar los cuatro comensales.

El otro plato para compartir fué una ensaladilla rusa cremosa y sabrosa. Aunque al día de hoy no se utilizan las aceitunas en la ensaladilla hicimos la pregunta que la maitre nos aclaró que no tenía pero fué a confirmarlo a la cocina. No tienen aceitunas pero tiene otros ingredientes que la convierten en un plato excelente.

Pasando a los segundos platos hubo dos peticiones a los platos fuera de carta. Un magnifico ejemplar de rodaballo que compartieron dos personas. Excelente ejecución en la cocina, producto de superior calidad (carne fuerte y excelente sabor). Lo sirven limpio, dejando la piel – preguntan previamente – El otro plato fueron las almejas a la marinera, tamaño excelente, de las denominadas «almejas cuchillo» (por ser de un tamaño que se pueden tomar crudas y abrir con un cuchillo). Por supuesto ¡¡¡Extraordinarias!!!.

Hemos dejado para el final el plato menos atractivo a la vista pero con una esencia, un sabor, una calidad, una temperatura, …¡Espectacular!. Changurro a la Donostiarra, el auténtico. El mejor que hemos comido nunca. No lo decimos a la ligera, lo hemos tomado en sitios con estrellas Michelín, en muchos restaurantes vascos, ninguno como este aunque lo sirvan en plato. ¡¡¡Inolvidable!!!.

Y llegan los postres. Pensábamos compartir alguno de ellos, no porque no encontráramos el que que nos apetecía sino porque estábamos muy satisfechos con los platos anteriores. De nuevo la maitre «vino en nuestra ayuda» y nos sugirió compartir los dados de torrija artesana con pincelada de café con leche y su crema helada. Sirviendo emplatado cada uno de los trozos con su helado correspondiente. Muy acertada la recomendación.

Los platos fueron armonizados con vino tinto Rioja, Lan a mano 2016, un coupage mayormente de tempranillo y que ha recibido varios premios. Unos cafés y unos chupitos de «cóctel de licores» pusieron fin a esta agradable y deliciosa comida. Volveremos porque se nos han quedado temas en el tintero, queremos decir en la cocina.

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